El pingüino es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, además claro está , que el ser humano y este Ferro de Cordon que pasa las fechas y no solo no le encuentra la vuelta sino que además repite los errores.
No le niego que el DT busca, para un equipo sin nueve, con nueve, con dos nueves, con doble cinco, pero el problema no es táctico sino conceptual. Al día de hoy no se sabe a que juega este Ferro versión 2024 o no se decide a que jugar.
A grandes rasgos, en el fútbol de hoy en día, podés jugar de dos maneras. “Fútbol de posesión”, tener la pelota, hacerla circular, adelantar la línea del fondo, sin posiciones fijas, jugadores atacando el espacio etc. etc. etc. O podes jugar el “Fútbol directo” Más estructurado, orden defensivo, saltar líneas, referentes de área, viveza para buscar la segunda pelota.
Ferro no hace ni una ni otra. Porque sale del fondo circulando excesivamente de un lado para el otro la pelota, con jugadores que no atacan el espacio ni nadie que sea inventivo y busque el pase entrelíneas, entonces es cómo que se “aburre” y empieza a saltar líneas, dónde no tiene referentes de área (Levato solo no alcanza) y cuándo se impone, nadie busca la segunda pelota o está lejos de dónde cae.
Y así realmente es muy, pero muy difícil
Salimos con Saracho al arco, línea de cuatro con Arena, Díaz, Boolsen y Rodríguez. Tres en el medio con Mussis, Gómez y Moreyra. Blanco más suelto y arriba Retamar y Levato
Patronato con 10 pescadores del Paraná y el 10 coloradito que siempre nos hace goles jugué dónde juegue.
Esta formación muestra que el DT busca variantes, porque toma nota que de local nadie nos sale a atacar entonces se decide por 9 referente de área en vez de parar un equipo rápido para aprovechar espacios. Y está bien la idea pero mal la concreción, porque cómo ya señalé el equipo sale a buscar el partido, intenta ser prolijo y salir del fondo jugando la pelota la pie, pero lo único que hace es “marear” al balón que va del 2 al 6, del 6 al 3, del 3 al 6, del 6 al 2 y del 2 al 4, mientras arriba nadie se desmarca y en el medio nadie se muestra.
Patronato hace algo que nadie había hecho y es muy probable que de acá en más lo hagan todos, pone al 5 a hacerle marca personal a Blanco y nos complica porque es el único que puede inventar algo. Su lugar lo ocupa Moreyra que se tira al medio, pero en el medio también están Gómez, más cerca de los centrales y Mussis un poco más adelantado.
En definitiva la apuesta es ver si Retamar puede hacer algo en algún mano a mano porque las subidas de Rodríguez o de Arena terminan casi siempre, volviendo a empezar o en centros que fácilmente despejan los paranaenses.
Encima sin buscarlo, sin merecerlo y cómo nos viene pasando habitualmente, ello llegan al gol.
Foul tonto e innecesario de Mussis al borde del área, que de paso muestra lo mal que estábamos parados en el fondo, González le pega, uno desde la platea ve que, por dónde está parado Saracho con que pase la barrera es gol y tal cual la pelota se mete en el arco
Perdemos 0-1 en la primer pelota que patean al arco y no es casual que en 10 fechas que van del campeonato nos hayan hecho goles en todos los partidos. Porque marcamos mal, retrocedemos peor y contenemos más mal y peor.
Y encima, cuándo nos hacen un gol e inclusive cuándo lo hacemos nosotros, tenemos unos minutos de desconcentración que sinceramente yo no sé a que aducirlos.
Perdemos la pelota, nos paramos, todos llegan tarde a los cruces, para parar la pelota necesitan de tres a cuatro movimientos. Pasan unos minutos y más o menos nos acomodamos en la cancha, pero ese tiempo que somos un desastre después que hacemos o nos hacen un gol, son los que le sirve al rival para empatar si le marcamos o pararse bien en el fondo para aguantar el partido si el gol lo hicieron ellos.
Desde el gol de ellos hasta el final del primer tiempo no pasó nada. Ellos abroquelados atrás y nosotros pasándonos la pelota sin sorpresa ni imaginación. Si todo lo que armamos va a depender del final que le den Arena o Rodríguez realmente estamos en problemas.
Blanco era el único del que se podía esperar algo, pero está muy solo, no tiene con quien juntarse, las pocas veces que lo hicieron con Moreyra crecía una ilusión que inmediatamente se desvanecía.
Apenas empezado el segundo tiempo Ferro encuentra el empate. Córner desde la derecha, la pelota le cae a Boolsen, que la para y define como un 9 con un tiro cruzado.
El partido 1-1 y con todo el período por delante. El Gordo manda a Murillo x Arena y Tomasetti x Mussis. Da pena que Nahuel pague saliendo del partido porque juega en un puesto que no es el de él, yo creo que podría ir de 2 en lugar de Díaz.
Tomasetti es un jugador muy interesante, algo “morfón” si se quiere, pero vertical y encarador busca cambiar el partido, pero no tenemos sociedades, nos falta juntarnos, saber que va a hacer el compañero, el famoso dar el pase “dónde va a estar y no dónde está” seguimos siendo previsibles. Entran Mosca x Moreyra García x Retamar y López x Levato en cambios puesto por puesto que no modifican la ecuación…porque no existe ecuación, no hay una línea de juego. Se podrá mejorar porque López gana más en los pelotazos que le tiran, pero nadie busca a dónde va la pelota.
En definitiva tuvimos la pelota más de 80 minutos, contra un rival flojo y que no quería jugar y solo marcamos un gol y nos perdimos otro, ambas por jugada de pelota parada.
El empate duele, porque no hay ninguna chance de ascender si no se gana de local, más contra estos equipos que realmente no muestran nada.
Pero lo más grave es que no ha línea de juego y los errores siguen repitiéndose. Esta vez el árbitro vaya a saber porque, no cobró una jugada que podría haber sido penal de Gómez, pero eso no es lo que nos tiene que preocupar, lo que nos tiene que preocupar es ¿Qué hace Gómez defendiendo en el lateral casi sobre la línea de fondo?
Así nos pasa en todas las líneas, somos desordenados defendiendo, previsibles atacando y sin línea de juego. Van 10 fechas, falta mucho, pero cada vez falta menos.
